Nuevas amenazas contra el Sinn Féin

El pasado jueves, 27 de septiembre, dirigentes del partido republicano Sinn Féin revelaron la existencia de nuevas amenazas provenientes de paramilitares lealistas (protestantes) contra varios miembros de su partido y periodistas afines a la causa republicana. En los estudios de la cadena de televisión UTV en Belfast se recibió un paquete que contenía balas y los nombres de seis personas, según declaró el histórico primer alcalde republicano de la capital norirlandesa Alex Maskey.

Fuentes republicanas, citadas por la agencia de noticias británica Press Association (PA), aseguraron que en la lista de amenazados figuran Richard McAuley, jefe de prensa del presidente del Sinn Féin, Gerry Adams, y Robin Livingstone, editor del periódico de Belfast Oeste «Andersonstown News«,  junto a detalles personales, como las direcciones de sus domicilios. Al parecer, el paquete pudo ser enviado por los Defensores de la Mano Roja, un grupúsculo disidente compuesto por paramilitares lealistas (protestantes) opuestos al proceso de paz. Un portavoz de la Policía de Irlanda del Norte (PSNI) aseguró que se está investigando el asunto, aunque no quiso ofrecer detalles sobre las identidades de los amenazados.

Maskey calificó el suceso de «siniestro y perturbador«, al tiempo que advirtió de que no se trata de un incidente aislado. «Pido a los políticos unionistas que demuestren madurez, que condenen estas amenazas y que usen cualquier influencia que tengan para acabar con estas acciones. La PSNI también tiene la obligación de informar a las personas implicadas sobre la naturaleza de las amenazas«, resaltó el dirigente republicano, que actualmente representa al Sinn Féin en el Consejo que supervisa a la Policía norirlandesa.

El envío del paquete amenazador con balas y nombres a la cadena UTV se produjo horas después de que una oficina del Sinn Féin en Derry, la segunda ciudad más importante del Ulster, fuese atacada con bombas incendiarias. En esa ocasión, todas las sospechas recayeron sobre disidentes republicanos descontentos con la decisión tomada el pasado mes de febrero por el Sinn Féin de reconocer, por primera vez en su historia, la autoridad de la Policía y de la Justicia norirlandesa.